- La relación de este sector de la población con las pantallas y la tecnología es un factor que debe contenerse en cualquier investigación que analice la cultura juvenil para poder entenderla con mayor precisión, afirman analistas
“Los adolescentes y jóvenes de hoy leen en las pantallas”, manifestó ayer Roxana Morduchowicz, Doctora por la Universidad de París VIII y docente titular en la carrera de Ciencias de la Comunicación en la Universidad de Buenos Aires en su conferencia Leer en tiempos de pantalla, transmitida por el Facebook de CONARTE.
“Los chicos de hoy no leen menos que los de antes, simplemente que lo hacen en otros soportes, en pantallas y con otros fines y objetivos. Cada vez más, las lecturas de los jóvenes se dan en pantalla y aparecen nuevos ‘textos’ que son diferentes en el más amplio sentido de la palabra texto, no el tradicional escrito, sino como el que se gesta en las redes sociales”, expresó.
Dicha conferencia, organizada por CONARTE a través de la Dirección de Desarrollo y Patrimonio Cultural, se realizó como parte de un ciclo y un espacio de reflexión y diálogo en torno al libro y la lectura.
El impacto de la tecnología en los jóvenes
“Es imposible analizar y conocer la cultura juvenil sin entender la relación que los adolescentes y los jóvenes tienen con las pantallas y la tecnología”, manifestó Morduchowicz.
“La tecnología transformó la vida cotidiana de los jóvenes que desarrollan todas sus actividades de una manera diferente a como lo hacíamos nosotros cuando éramos adolescentes en el siglo 20. En la actualidad todas las actividades de los jóvenes están atravesadas por las pantallas.
“Por eso decimos que los adolescentes tienen una experiencia cultural diferente, porque experimentan nuevas maneras de percibir, sentir, ver, escuchar y de leer. Esto quiere decir que experimentan nuevas maneras de leer”, señaló.
Generación de lo no lineal
“Los adolescentes y jóvenes actuales son la generación de lo no lineal, ni secuencial”, afirmó Morduchowicz.
“Ellos abren diferentes pantallas y tienen lecturas superpuestas y simultáneas y esta es una marca generacional muy diferente a las prácticas lectoras que ejercemos los adultos, que somos la generación de lo lineal.
“Los jóvenes menores de 20 años tienen prácticas no estructuradas. Los contenidos los ven “cuando quiero, donde quiero, con quien quiero y de la manera que quiero y en la plataforma que elijo”, apuntó.
Además, agregó, las lecturas son interactivas. Hoy, los chicos tienen la posibilidad de dialogar con autores o con otros lectores y pueden producir medios digitales propios, entonces, se puede decir que no existe un único tipo de lector, ni una sola forma de leer.
Cómo potenciar y promover la lectura de ficción a través de las pantallas
La Doctora Roxana Morduchowicz dijo que algunas estrategias para potenciar y promover la lectura de ficción a través de las pantallas son contactar y dialogar con los autores en las redes sociales; organizar foros de lectores para debatir la historia o los personajes y compartir en las redes sociales finales diferentes al propuesto; explorar sitios web con críticas al libro o entrevistas al autor; ver películas o series afines al contenido de la obra; crear blogs y videos para recomendar libros, así como impulsar clubes de lectura virtuales.
Roxana Morduchowicz es doctora por la Universidad de París VIII y docente titular en la carrera de Ciencias de la Comunicación en la Universidad de Buenos Aires.
Dirige el programa La escuela y los medios, dependiente de la Secretaría de Educación del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, donde es responsable de la formación docente en este campo.
Es la directora del congreso nacional El diario en la escuela – Los medios de comunicación y la educación, organizado anualmente por la Asociación de Diarios del Interior (ADIRA), donde dirige el programa homónimo.
Es consultora en medios de comunicación y educación para la Unesco y la Organización de los Estados Americanos.
El Fondo de Cultura Económica también ha publicado de su autoría Los adolescentes del siglo XXIi. Los consumos culturales en un mundo de pantallas (2013); Los adolescentes y las redes sociales. La construcción de la identidad juvenil en Internet (2012) y El capital cultural de los jóvenes (2004).