Tu piel es lo que comes

Todo lo que comes, se refleja en la piel.

Así que si deseas tener una piel tersa, suave y acariciable, debes comer saludable. Si logras las cantidades adecuadas de proteínas, carbohidratos y grasas, tendrás no sólo la piel, sino uñas y cabello en óptimas condiciones.

Comer frutas y verduras es muy recomendable. Pueden ser uva, piña, manzana y caña de azúcar, ya que contienen hidróxidos, que mejoran la textura de la piel y retrasan las líneas de expresión.

Frutas y verduras son ideales para una piel lozana.

Para ayudar la piel y la uñas recomendamos alimentos ricos en zinc, como cereales integrales, soya, mariscos, aves,  y hierro, que encontrarás en carnes rojas y blancas, espinacas.

De todos modos es bueno que consultes con un dermatólogo que te diga cuál es la mejor opción de tratamiento según su tipo de piel.

Existen algunas reglas básicas

• El baño debe ser breve.
• Utiliza jabones libres de color, perfumes y sustancias antibacteriales.
• No uses cepillos, esponjas o toallas como exfoliantes, porque eso daña y seca la piel.
• Utiliza crema emoliente varias veces al día. Lo ideal son tres veces para piel normal, y con mayor frecuencia sólo si es piel grasosa. Lo importante es la frecuencia, no la cantidad.
• Utiliza crema emoliente varias veces al día. Lo ideal son tres veces para piel normal, y con mayor frecuencia sólo si es piel grasosa. Lo importante es la frecuencia, no la cantidad.
• Mantente hidratada, porque eso evita arrugas y envejecimiento prematuro.