Recupera la apariencia de los cadáveres para resolver crímenes.
La ola de muerte y sangre que desde hace años se vive en México desencadenó un invento revolucionario que hoy puede ayudar en la resolución de crímenes en todo el mundo.
Alejandro Hernández Cárdenas, perito forense de Ciudad Juárez, Chihuahua, inventó una fórmula que prácticamente “revive” cadáveres, o los regresa a un estado en que pueden ser revisados para conocer las causas de su muerte y dar con los responsables de los homicidios.
La fórmula es una rehidratación de los cadáveres, con lo que ayuda a que cuerpos desmembrados, descompuestos, rostros desfigurados y huellas dactilares desvanecidas puedan recuperar su apariencia, y evitar con ello que los cuerpos terminen en fosa común. Este método es único en el mundo, motivo por el cual Hernández Cárdenas ganó reconocimiento mundial.
En el procedimiento de rehidratación, la fórmula no es lo único fundamental en el trabajo para recuperar la apariencia casi natural de un difunto, ya que es necesario que se utilice una especie de ‘jacuzzi’ para sumergir los cuerpos.
El líquido comienza a incorporarse al cadáver, el proceso culmina con la aparición de señas particulares y características de la persona, tales como pueden ser las cicatrices, lunares e incluso, tatuajes.
Durante la inmersión, la formula comienza a revitalizar los tejidos muertos, abriendo la posibilidad de que los peritos trabajen en la búsqueda de elementos para dar con las causas de muerte, así como para ayudar a que familiares logren identificarlos.
Sin duda un orgullo para México no sólo por ser un logro a nivel mundial, sino que con ello se da certeza a miles de familiares de personas desaparecidas víctimas de la violencia, pues sus existe la posibilidad de que sus familiares sean identificados.