Este 17 de octubre es el día Mundial del Bebé Prematuro.
Cada año unos 15 millones de bebés nacen prematuramente en el mundo, y se considera que es la principal causa de muerte en recién nacidos.
Más de un millón fallecen como consecuencia de este parto adelantado.
Los bebés que sobreviven con frecuencia sufren de problemas de salud a largo plazo, como la parálisis cerebral, la pérdida de la visión y audición y discapacidades intelectuales.
En el 2015 fue la primera vez que las complicaciones por parto prematuro superaron a todos los demás factores como causa de muerte en niños pequeños. De los aproximadamente 6,3 millones de fallecimientos de niños menores de 5 años durante el 2013, casi 1,1 millones fueron por esta causa.
En concreto, las complicaciones directas de nacimientos prematuros representaron 965.000 muertes durante los primeros 28 días de vida, con 125.000 muertes adicionales entre las edades de un mes y 5 años. Otras causas principales de las muertes de bebés incluyen la neumonía, que mató a 935.000 niños menores de 5 años, y complicaciones en el parto, que causó 720.000 muertes, 662.000 en el periodo neonatal, la mayoría en el primer día de vida, y 58.000 en el postneonatal.
Estos resultados, publicados en la revista The Lancet y luego difundidos en todo el mundo el Día Mundial de la Prematuridad, trajeron más atención y urgencia a las iniciativas mundiales para abordar el parto prematuro.